Parece que este momento tan catastrófico que estamos viviendo va a resultar positivo para todo el mundo. Pues la caída de las criptomonedas está haciendo que los usuarios apaguen sus equipos dedicados al minado de la mismas, reduciendo así el impacto energético.
El desplome de las criptomonedas, y más concretamente del Bitcoin y Ethereum, están reduciendo el uso de energía causado por el minado de las mismas de forma drástica, El nivel es tan grande, que la reducción de los últimos días, unas 110.000 toneladas métricas de CO2 al día, equivaldría a todo el uso de energía total de países como Austria. La caída del uso de energía por el minado de criptomonedas, por tanto, es una muy buena noticia.
Sobre todo, teniendo en cuenta el terrible impacto ambiental que causan estos activos. Algunos países, como recientemente Irán, de donde proviene el 4,5 % del minado de criptomonedas según Elliptic, han decidido apagar más de 100 centros de minado para evitar el alto consumo de electricidad. China, por otro lado, prohibió esta práctica por el mismo motivo.
Digiconomist, sin embargo, advierte que el uso de energía volverá a aumentar en cuanto Bitcoin y Ethereum vuelvan a subir. Por lo tanto, es muy probable que tanto compañías como las administraciones gubernamentales continúen tomando medidas en cuanto a su uso y minado.
Actualmente, la compañía de movilidad eléctrica fundada y dirigida por Elon Musk cuenta con una capital de 915 millones de dólares en esta criptomoneda. Musk, sin embargo, ha confirmado que continuarán con su intención de invertir en este activo a largo plazo. Asegura, además, que no los venderá pese a la caída de su valor.